OESSP 01/02/18. Escribe: Jazmin Goicochea. “Queremos devolverle a Villa El Salvador lo que nos dio”, es una frase de Elizabeth Vargas, una de las impulsoras del colectivo Mujeres de Arena, de este pujante distrito del sur de la ciudad de Lima. La constitución de esta organización fue en febrero de 2015 y respondió a la necesidad de actuar frente a la coyuntura política por la que pasaba el país y el distrito de Villa El Salvador. Por un lado, la situación en el país -para ellas- se tornaba muy peligroso, pues se evidenciaba a Keiko Fujimori como una de las propuestas con más posibilidades de ganar en el proceso electoral de 2016, siendo un golpe a la memoria de Villa El Salvador, pues durante el gobierno de Alberto Fujimori su distrito fue despojado de su historia de asidua participación de hombres, mujeres y jóvenes. Por otro lado, en Villa El Salvador imperaba el desconocimiento sobre su historia, así como la inexistencia de espacios de formación política y participación de mujeres.
En ese contexto surge la necesidad de devolverle al distrito lo que alguna vez les dio, en ese afán, tres mujeres de izquierda –Elizabeth Vargas, Noemi Soto y Rocío Paz- con trayectoria política concretaron de forma autogestionaria la primera Escuela de Formación Política, siendo su duración de abril a noviembre. Este primer impulso logró convocar a cerca de 40 personas, entre jóvenes desde 15 años, así como adultas; sobrepasando las expectativas de asistencia pensadas.
En el 2016 y el 2017 decidieron postular la Escuela de Formación Política -bajo el nombre de Escuela de Formación Integral para Mujeres de Villa El Salvador- al presupuesto participativo que la municipalidad convocaba para el distrito. La escuela impulsada por Mujeres de Arena ganó el presupuesto participativo y con lo obtenido cubrieron el vacío en logística, sin embargo, al no ser suficiente consensuaron dar un aporte solidario de 20 soles por miembro del colectivo.
Durante los 3 años de fundación y de sacar adelante la Escuela de Formación Política, lograron generar vínculos con distintos espacios para sostener la iniciativa. En primera instancia, señalan el apoyo de las distintas organizaciones de base del distrito, también hacen énfasis de lo significativo que ha sido el presupuesto participativo que -a pesar de varias dificultades- lograron conseguir por dos años, y para el 2017 se vincularon con la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, por medio del Seminario de Economía Social, Solidaria y Popular, para lograr la certificación de las 80 asistentes a la Escuela de Formación Integral de Mujeres de Villa El Salvador.
Como es evidente la escuela es el foco de atención para las compañeras miembros de Mujeres de Arena y, en ese sentido, han logrado fortalecerse. Sin embargo, también agotan sus fuerzas en la participación activa en espacios como el colectivo de Concertación por la Equidad de Género distrital y el colectivo de Seguridad Ciudadana impulsada por la sociedad civil. Además, vienen generando distintas actividades que impliquen recuperar la memoria del distrito, haciendo énfasis en la participación constante de mujeres en su historia. Así y con distintas iniciativas intentan romper con los imaginarios construidos sobre el cómo deben ser las mujeres, en ese sentido, elevan una mirada de mujer luchadora y con grandes capacidades para hacer valer sus derechos.
A la fecha, el colectivo Mujeres de Arena está compuesto por 9 mujeres, entre jóvenes y adultas, y se encuentra a puertas de cumplir 3 años en febrero. Durante sus 3 años de lucha han sido parte de la construcción de su sueño de ver a Villa El Salvador como un distrito generador de cambio en el país, logrando así reconocimiento y legitimidad en el distrito.